Zacapu, Michoacán, 26 de marzo de 2025.- En los últimos años, Zacapu ha experimentado un incremento notable en las temperaturas, un fenómeno que está generando preocupación por sus efectos en los ecosistemas locales.
Esta tendencia, vinculada al cambio climático global, amenaza la rica biodiversidad de la región, que incluye cuerpos de agua como el lago de Zacapu y áreas naturales circundantes.
Datos recientes consultados por Agencia Mich del Servicio Meteorológico Nacional indican que las temperaturas en Zacapu, que típicamente oscilan entre 5 °C y 28 °C a lo largo del año, han mostrado un aumento progresivo, con picos más frecuentes por encima de los promedios históricos.
Este calentamiento, combinado con cambios en los patrones de precipitación, está alterando el equilibrio de los ecosistemas locales.
Expertos entrevistados por Agencia Mich, señalan que el lago de Zacapu, un recurso vital para la fauna enfrenta una reducción en su nivel de agua debido a sequías prolongadas y la sobreexplotación para actividades agrícolas, lo que pone en riesgo especies endémicas.
La pérdida de vegetación natural, exacerbada por el aumento de la temperatura y la deforestación, también contribuye a la disminución de la capacidad del ecosistema para regular el clima y almacenar carbono.
Esto ha generado un círculo vicioso: menos vegetación significa mayor calentamiento, lo que a su vez dificulta la recuperación de los bosques templados y humedales de la zona.
Asimismo, el incremento térmico está afectando el comportamiento y la distribución de especies animales, obligándolas a desplazarse o enfrentarse a condiciones inadecuadas para su supervivencia.
Organizaciones locales y autoridades han comenzado a plantear estrategias de conservación, como la restauración ecológica y el uso sostenible del agua, para mitigar estos impactos.
Sin embargo, se requiere una acción colectiva urgente que involucre a las comunidades, el gobierno y especialistas para preservar el patrimonio natural de Zacapu frente a los crecientes desafíos del cambio climático.
La situación actual es un recordatorio de la necesidad de armonizar el desarrollo humano con la protección del medio ambiente en esta región de gran valor ecológico y cultural.